Calle del Doctor Fleming Josechu mira hacia donde estaba el colegio de San Antonio. Al fondo, la casa natal del pintor Román. |
Calle de Santa Cruz Los maristas de San Antonio vivían en el último piso de la casa del centro. |
Acceso a la calle del Doctor Fleming. Hubo un tiempo que estuvo cerrada al tráfico, con una tapia donde está ahora el paso de cebra. Enfrente del edificio grande estaba la escuela de San Antonio. |
FOTOGRAFÍAS: Barrio de Santa Clara en Burgos. (Tomadas en febrero de 2014).
No hace mucho que un seguidor de este Cajón de Sastre, que había visto en la entrada “El Burgos de mi infancia” una cita sobre el colegio de San Antonio, ya desaparecido, me preguntaba dónde se encontraba este centro escolar. Han pasado un par de meses desde aquella consulta y hoy ya lo puedo decir con exactitud (digo con exactitud porque mis recuerdos eran vagos al respecto; en honor a la verdad, en algún momento llegué a pensar que esos recuerdos eran más producto de un sueño que de una realidad). El asunto se convirtió en un reto para mí. Así, un día de la pasada semana, me planté en la calle de Santa Clara y pregunté a toda gente mayor que pasaba; era por la mañana, cuando l@s jubilad@s salen a comprar y hacen corrillos en las aceras. No exagero si digo que interrogué a más de veinte personas; pero el colegio de San Antonio era una niebla del pasado, se recordaba como algo muy lejano, difuso. A más de medio siglo de su desaparición, cada persona interrogada contaba su versión, cada uno ubicaba el colegio en un lugar y eran raras las coincidencias. Sólo cuando encontré a José Antonio Calderón (“Josechu”), industrial que fue en Santa Clara, pude saber la localización exacta, y algún detalle más para la memoria del barrio y de la ciudad. Josechu, además de vecino de Santa Clara (8O años viviendo en el mismo lugar) fue alumno en San Antonio, y por ello sus indicaciones fueron las que definitivamente tomé como válidas. Me contó que el colegio se encontraba en lo que ahora es calle del Doctor Fleming, antigua Héroes de la División Azul, en el edificio donde ahora se encuentra la taberna de Tanín. Hoy, esta calle está abierta al tráfico, pero cuando la escuela se hallaba en funcionamiento, se encontraba cerrada por un tapial, aunque con accesos al colegio y a diversos negocios que había en lo que entonces hacía de patio escolar. Adosado a la escuela, cuenta Josechu que había un industrial que, mediado el siglo XX, se dedicaba a la venta de gasógeno, y un poco más adelante un taller de camiones, y haciendo esquina con Santa Clara, un almacén de vinos y licores de Carcedo. Así mismo y siguiendo con la descripción de industrias, el antiguo alumno recuerda en la acera de enfrente la “carbonería de Vivar”.
En lo que se refiere a la escuela propiamente dicha, la memoria de Josechu nos habla de un edificio de dos plantas con cinco aulas de 40 y más alumnos cada una. Era regentada por los hermanos maristas, aunque no era tan elitista como la del Liceo Castilla, pues aquí se mezclaban alumnos acomodados con otros de extracción más humilde. Aquellos hermanos maristas vivían en una casa de la calle de Santa Cruz, en el último piso, desde el cual y antes de construirse un gran edificio enfrente (circa 1960), vigilaban a los chicos del colegio cuando se encontraban de recreo en el patio.
Josechu me prometió rebuscar entre sus recuerdos alguna fotografía de cuando pasó por San Antonio, pero no estaba seguro de encontrarlas. Si en algún momento puedo disponer de ellas las insertaría.
La memoria de la ciudad está ahí, esperando ser recuperada. Escuelas, cines, iglesias, comercios, industrias... todo lo que se fue y algo significó se conserva en la memoria. Habrá un día que no.