martes, 29 de marzo de 2022

RÓTULOS COMERCIALES. EL ESTABLECIMIENTO DE FRANCISCO PEÑA EN LERMA


De cuando se viajaba con manta 


Qué fue de aquellos sastres...

... que eran a la vez comerciantes.

Últimas novedades para señora y caballero
Precios económicos.


FOTOGRAFÍAS: Rótulos en comercio de Lerma, (Tomadas en marzo de 2022)


Los letreros comerciales antiguos, pintados en muros y paredes de edificios, son un patrimonio a mi parecer no suficientemente valorado. Quedan pocos o contadísimos testimonios, ya que la mayoría de ellos desaparecieron, bien por remodelaciones de los edificios o bien porque los mismos comercios igualmente desaparecieron. Los contados que quedan son testimonios históricos no solo de la actividad comercial en las ciudades, grandes y pequeñas, sino también del dinamismo y evolución del arte en lo que se refiere a la cartelería de muros, con sus distintas tipografías, dibujos y adornos. Resulta difícil hoy encontrar algún cartel que tenga más de medio siglo de antigüedad, por eso cuando encontramos uno que pudo ser pintado en los años treinta o cuarenta del pasado siglo, como es el caso del alarde que aquí os dejo hoy, queridos amigos de este Cajón de Sastre, produce ciertamente gran asombro. Se trata de un panel publicitario, seguramente hecho por un experto rotulista, pintado sobre pared blanca y situado en la calle Chica de Lerma, que anuncia toda la gama de actividad y ventas del establecimiento de Francisco Peña. El panel llama la atención porque ocupa una gran superficie en la parte alta del edificio. A pesar de la suciedad del muro, debido a la pátina del tiempo pasado, se aprecia con bastante nitidez todo lo anunciado, que es mucho. Debajo de la marca comercial (FRANCISCO PEÑA), rotulado en grandes letras, pueden verse tres compartimentos escritos con preciosa tipografía de época y cada uno de ellos anunciando las especialidades del comercio. Así, visto de frente, en el panel de la izquierda puede leerse

PAÑERÍA

ÚLTIMAS NOVEDADES

PARA SEÑORA Y CABALLERO

PRECIOS ECONÓMICOS

Por su parte, en el panel del centro, en el espacio libre entre dos balcones y bajo el gran letrero de Francisco Peña, puede leerse  

SASTRE

Y COMERCIANTE

Por último, a la derecha del conjunto se aprecia un espacio más y con otra leyenda, escrita también con artísticas letras de distinta tipografía, propias de los años treinta cuarenta del pasado siglo, en la que puede leerse

CAMISERÍA

MANTAS

DE CAMA Y VIAJE

FAJAS Y BOINAS   

Sin duda podría decirse que el edificio que alberga estas delicias publicitarias de antiguo comercio es una ruina histórica, dada su degradación, pero por todo lo comentado, merecería ser salvado de la piqueta, al menos la cartelería descrita, joya arqueológica de la cartelería comercial en Burgos.


domingo, 6 de marzo de 2022

EN LAS TIERRAS ALTAS DE SEDANO


Una extraña construcción... 


un conjunto singular...

azotado por los vientos del páramo...


con cúpula y una linterna... 


más un refugio con arquitectura cortavientos.


FOTOGRAFÍAS: Aprisco y chozo gigante en las Tierras Altas de Sedano (Tomadas en marzo de 2022).

En las Tierras Altas de Sedano siempre floreció el brezo y hubo pastos, y siempre cantó la alondra, invisible y quieta, al anunciar la entrada de la primavera. En los altos páramos de Sedano, a veces interrumpidos por vallejadas y barrancos perdidos, tal vez nunca hollados por humanos, se alzan hoy, desafiantes como ejército hostil, gigantescos molinos de aspas rugientes que comen, cortan el viento y silencian el canto de los pájaros anunciadores. En las Tierras Altas de Sedano, bellas pero inhóspitas para los que no sueñan, se fundó un pueblo de viento con ráfagas de vida hoy apagadas. Mozuelos lo llamaron, como si hubiera de ser para chicos de prolongadas esperanzas. Hoy ya no queda nadie, aquellos mozuelos, que tan bien conocían las tierras altas, tanto como a sus ovejas, se fueron a ciudades en las que apenas hay lugar para raíces profundas y de calidad. Así, sus apriscos y refugios pastoriles, hechos con piedra desgajada de la madre, quedaron a merced de las estrellas, aquellas con las que tanto convivieron y conversaron.  

En las Tierras Altas de Sedano abundan los chozos pastoriles, la mayor parte arruinados. Alguno de ellos con protección a varios vientos, demostración de inteligencia en el páramo, otros, con el asiento para el mozuelo pastor cuando se recogía hasta que amainaba la tempestad o el hambre. Entre todos, llama la atención uno que no merece ser llamado chozo, sino, más bien, catedral de los chozos. Por su grandeza, en medio de fincas de cereal nunca vistas hasta ahora en las tierras altas, este monumental aprisco tiene una gran cerca de piedra bien asentada, seguramente hecha por algún experto asentador cuyo oficio ya se extinguió, y en uno de sus lados una amplia construcción circular con techado de tierra, donde crece la hierba en libertad. Rematada en cúpula por una linterna que da luz a su interior, habrá quien, sobrado de imaginación, compare esta construcción con las yurtas de los mongoles, y no le faltará razón, al fin y al cabo, unos y otros pastores son, o eran.


Extraños en las Tierras Altas de Sedano.