viernes, 10 de julio de 2009

SANTE, UN PALACIO A ORILLAS DEL OCA


Diario 16 Burgos
(18 de octubre de 1992)


Situado entre Oña y Trespaderne, incrustada en la negrura del monte, Sante ha sido en los últimos siglos una finca particular. Ello ha permitido que estudiosos de la historia y el arte y curiosos en general hayan tenido que conformarse con observar a distancia el precioso lugar y su palacio mezcla de chalé indiano y palacio del renacimiento.
La propiedad privada de Sante no ha sido obstáculo para que, aprovechándose de su soledad, nocturnos saqueadores de palacios y ermitas hayan campado por sus respetos y desvalijado hasta el agotamiento todo el valor mueble de este edificio. Y lo que es peor, hay quien, incluso, habiendo tenido ocasión de visitarlo, cuenta que el tejado, lleno de goteras, amenaza con derrumbarse. No evitar su ruina, dejar que desaparezca este bello palacio, produciría en el patrimonio estético burgalés un hondo vacío, lo cual podría evitarse si las instituciones competentes se hicieran cargo de ello llegando a un entendimiento con sus actuales propietarios. Con el ánimo de recabar información de los guardeses, un no muy lejano día, visitamos esta finca, encontrándonos en primer término con un elevado puente sobre el río Oca y un viejo edificio en cuyo frente un cartel anunciaba “Fábrica de aguarrás. Se prohibe fumar”.
Superado el citado puente, a los pocos metros, ocultos ya por los hierbajos, se cruzan los roñosos railes de la fenecida línea férrea Santander-Mediterráneo. Un poco más adelante y siguiendo un idílico sendero puede verse, a un lado, la Fuente del Cenador, que surge caudalosa del suelo y está rodeada por un banco de piedra ganado al talud. No es necesario un gran esfuerzo para imaginarse sentados en este sombrío fontanar a damas almidonadas y caballeros de bigotes retorcidos, con un vasito de cristal, tomado medicinales aguas. Pero esta imagen sería en verdad engañosa, pues el generoso venero no tiene propiedad terapéutica alguna. Son aguas duras, nacidas de las entrañas de la caliza, en las que malcuecen los garbanzos.
Prosigue el suave camino, con gran arbolado a un lado y un viejo muro de piedra, recubierto de hiedra, al otro. Tras dejar atrás un oxidado “Ojo al tren. Paso sin guarda”, se desemboca en una explanada con aterrazamientos y coquetas balaustradas de piedra. Los jardines abandonados esconden entre la maleza algunos románticos bancos, también de piedra. Y sobre todo ello, majestuoso, se alza el gran palacio de Sante, un enorme edificio, construido con espléndidos sillares, que parece competir con los grandes palacios del siglo XVI.

Nombre e historia de Sante

El nombre de Sante viene derivado, según el historiador benedictino Argaiz, de su origen "Vallis Sanctis", muy probablemente relacionado con todo el movimiento eremítico y/o monacal que se vivió en este valle y en el de Valdivielso durante la Alta Edad Media. Hay quien, sin embargo, en la actualidad se empeña en vincular tal denominación con la posible utilización de este lugar como balneario o casa de salud y reposo, y por ello acentúan Santé, confiriéndole de esta manera un carácter afrancesado que no le corresponde.
Aparece nombrado Sante con relativa frecuencia en la documentación medieval. Siguiendo la “Colección Diplomática de San Salvador de Oña (822-1214)”, lo vemos citado como parte de las donaciones que se hacen al cenobio fundado por el conde Don Sancho. Por otro lado, en el libro “Documentación del monasterio de San Salvador (1032-1284)” de Isabel Oceja, se da a conocer un documento de 1069 en el que el hidalgo Juan da al abad de Oña una casa que tenía en el lugar de Sante. Y también, por otro documento de 1274 se sabe que en esa fecha había iglesia y que la misma estaba bajo la advocación de San Andrés, al que se cita como San Andrés de Sante. Los dos últimos documentos, pues, parecen querer demostrar que ya en aquellos siglos había un núcleo de población.
En época moderna, en el Diccionario de P. Madoz se menciona la existencia de un palacio: “Sante conserva el palacio que hizo edificar y habitó el mencionado conde Don Sancho”. Se refiere el geógrafo al conde fundador de Oña, pero resulta evidente que la fecha de fundación no concuerda con la arquitectura del edificio actual, cuyos dos primeros cuerpos y la solana con arquerías parecen de época herreriana. Las torres que ahora pueden verse, según la tradición oral conservada por los actuales guardeses de Sante, “fueron construidas por Lino Zaldívar, maestro de Cereceda que hizo fortuna en América en el siglo pasado (en el XIX)”, Cuenta Pilar García, la guardesa, que “Las piedras empleadas para su construcción fueron traídas en carros de bueyes desde el valle de Valdivielso”, y que “Lino Zaldívar compró Sante a los monjes benedictinos de San Salvador de Oña, que lo tenían como residencia de ancianos”.
Por otra parte, en un padrón de inmuebles del Ayuntamiento de Oña de 1905 figura la finca de Sante como propiedad de Pascual Bordix, y el resinero Miguel Rebolleda como su administrador. Cuentan que por entonces era una finca de recreo veraniego, servida por un gran número de servidumbre uniformada; que durante la Guerra Civil Española, la gran casona palaciega estuvo ocupado por las tropas alemanas, y que finalmente, hará unos veinte años, esta fue comprada por una mujer de San Sebastián, después de que su venta fuera anunciada en los periódicos de las provincias vascongadas.
Hace más de veinte años que nadie habita en Sante; su actual dueña no ha dado utilidad alguna al edificio y los enemigos naturales del patrimonio histórico, artístico y estético amenazan con llevarlo a la ruina. Sería una gran pérdida que lamentaríamos todos los burgaleses.

4 comentarios:

  1. Hace relativamente poco tiempo lo ha comprado un empresario de Burgos (no sé el nombre); se ven coches y furgonetas delante del edificio como si estuviera en obras. ¿Turismo rural, quizás?
    Saludos
    JLP

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  2. Suelo pasar por la carretera, y lo veo a distancia. Es una maravilla para la vista!
    Aunque una vez he estado algo más cerca en bici, no me he querido acercar más por si era una finca privada.

    Un saludo

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  3. "LAS VUELTAS DE SANTE" AHORRABAN UN KILÓMETRO DEL CAMINO DE OÑA A TRESPADERNE. CURIOSAMENTE,EN AMBAS POBLACIONES AUN LOS MÁS VIEJOS COMENTABAN DICHOS CONTRADICTORIOS RESPECTO AL ORIGEN Y LA DISPOSICIÓN DEL PALACIO. HABRE DE VOLVER (DESEO) ANTES DE QUE YO MUERA. TEDEJA, LA HORADADA, EL TREN DESVANECIDO...

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  4. ES DE 1 EMPRESRIO BURGALES CUENTA CON UNA FINCA DE MONTE DE500 HECTAS Y ESTA LA VENTA POR 1,5 MILLONES DE EUROS, ES UN SUEÑO PERO NO TIENE UTILIDAD PRACTICA . SOLO COMO FINCA DE CAZA O SIMILAR

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