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Ventana mutilada. |
FOTOGRAFÍAS: Ventanas de la Casa Blanca, Brizuela. (Tomadas el 4 de octubre de 2012).
Un día
reciente, abandoné los campos queridos y heridos de Castilla, con sus rastrojos
y lomas de campanario, allá por aldeas y pueblos de Castrogeriz y Villadiego, y
tomé las del norte. Hacía tiempo que no me acercaba al norte, tan dentro de mí.
Me acompañaba mi compañera y consejera, siempre atenta al detalle que se
escapa. Comimos en la ermita de La Paz, atalaya increíblemente desconocida y
desde la cual el mundo parece estar a tus pies, allá por los riscos de Nela,
encima de Sobrepeña, con los canales de Dulla de frente, con los montes
pasiegos perdidos en el horizonte. Imposible pedir más. Íbamos camino de
Brizuela y Puentedey, pero con escala en Nela, tanto tiempo en el olvido.
Buscábamos palacios y nos salió una ermita. ¡”Ermita de la Paz”! ¿Qué paz, la
de los desiertos, la de los muertos? ¿Hubo alguna guerra que desconocemos en
este recóndito y pacífico territorio? En la paz se hacen las guerras. Pero dejemos este juego y vayamos al
grano. En realidad, lo que yo quería
hoy era hablaros, otra vez, de ventanas. Y es lo que tiene salir al norte, que
siempre vuelves con la mochila llena. Primero hicimos escala en Brizuela, sí, allí donde hace ya muchos años encontré a Jesús, el cantero casi centenario que
sabía demasiado, todo sobre la piedra,
aquel que me enseñó la jerga hablada de los de su profesión, una
reliquia única. De entonces guardaba recuerdo de un palacio en la plaza, ahora
sé que es conocido como la Casa Blanca. No es casa de película ni de
presidencia, pero tiene su nobleza, y tiene, sobre todo, unas ventanas que para
sí las quisiera la White House. La de la fachada principal es soberbia, con sus
escudos y su porte clásico parece llevarnos hacia el S. XVII. La del costado
sur era bellísima también, pero alguien tuvo la infortunada idea de mutilarla
abriendo vano sobre vano, sellando el noble, abriendo otro de... (me reservo la
calificación).
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Ventana en Casa Blanca. |
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La Casa Blanca.
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Desde la Ermita de La Paz. |
Mi nombre es Sonia Brizuela.
ResponderEliminarSoy de San Luis- Argentina.
Buscando información de mis origenes llegue a saber de este hermoso pueblo. Hace unos 16 años viaje de Madrid a Bilbao sin saber que estuve tan cerca de Brizuela pero ahora por la tecnología puedo llegar allí
Gracias por los datos y relatar un poco de historia.
Gracias por el cometario, Sonia. Me alegra saber que desde esta bitácora has sentido la emoción de tus orígenes.
ResponderEliminarSaludos