DESCENSO DEL SELLA... HUY, PERDÓN, DEL ARLANZÓN

FOTOGRAFÍAS: Por el río Arlanzón (Tomadas el 27 de diciembre de 2009). 

Vender nuestro frío como baza turística. De semejante iniciativa nos enteramos hace pocos días por la prensa local. Al parecer, alguien ha pensado que el cierzo cortante que nos sacude cuando cruzamos los puentes de la ciudad en invierno es un potencial desaprovechado. Vale. No se puede negar que la iniciativa es original, pero sin duda osada. Aunque, bien mirado, quizá tiritar pueda ponerse de moda. Existen deportes de alto riesgo; cada vez más gente se juega la vida por el simple hecho de sentir grandes emociones. Bueno, todo es una broma, queridos amigos de este Cajón de Sastre. Además, los inviernos de Burgos ya no son lo que eran. Y si no, apliquemos al caso este febrero loco que hoy termina, que más parece un verano invernal que otra cosa. (Ya lo dice el refranero de mis amigos los pasiegos “Febrero, siete capas y un sombrero”).  

En fin, valga lo anterior para mostraros unas imágenes que tuve ocasión de capturar el 27 de diciembre de 20O9. Fue una mañana fría pero soleada, de esas que invitan al paseo en Burgos. Junto con otras personas, acompañaba en su recorrido poético a mi amiga Belín. Por el Arlanzón, entre los puentes de Santa María y del Instituto, bajaba un puñado de piraguas sorteando los peligrosos rápidos del río. La escena, llena de colorido, me pareció  tan insólita como pintoresca. Quizá nuestro invierno tenga más posibilidades de las que creemos.