Elías Rubio Marcos y su "CAJÓN DE SASTRE"

Recopilación de artículos publicados y otros de nueva creación. Blog iniciado en 2009.

martes, 29 de enero de 2013

PALACIO DE CADIÑANOS (2)

FOTOGRAFÍAS: Palacio de Cadiñanos (Tomadas en enero de 2013). 


LAS VENTANAS

Pascual Madoz, en su Diccionario (1845-1850), nos habla de un palacio con tres torres en Cadiñanos, y hay quien asegura que tuvo cuatro. Hoy, con nitidez, sólo vemos dos, las demás el viento se las llevó, aunque lleguen a apreciarse los arranques. El conjunto, que fue casa solariega de la familia Medina Rosales, tuvo que ser en su plenitud algo fuera de serie, comparable al de Monterrey, de Salamanca, o al de Zúñiga-Avellaneda, de Peñaranda de Duero, por decir algunos de la tierra. Contemplar ahora la ruina produce desasosiego, pero es un estado anímico que se compensa al ver tanta belleza como aún queda. El conjunto de ventanas, nueve de gran tamaño y otras muchas pequeñas, es de antología. Es tal el repertorio de motivos escultóricos que las adornan que dan ganas de aplaudir. Sin duda, tuvieron que trabajar maestros escultores de gran formación en esta magna obra, aunque  desconocemos quienes fueron. Lo que sí podemos saber es que ninguna de las grandes ventanas es igual, a simple vista lo puede parecer, pero si las observamos con detenimiento, veremos que cada una tiene sus propias variantes. Una maravilla, ya digo. Por todo ello, queridos amigos y seguidores de este Cajón de Sastre, guardamos hoy en el baúl de ventanas con historia, todas las que hemos podido ver, en la fachada principal y en los dos torreones que aún quedan en pie.










Orientado a la calle-carretera,
la ruina  del magnífico palacio
se presenta amenazadora.
 EL PELIGRO

Tras la entrada de 20 de julio de 2009 que aquí se hizo, vuelvo hoy a la carga con este palacio, joya maravillosa, despreciada y olvidada por quienes tienen la obligación de conservarla. Y es que no me puedo sustraer al hecho de que un monumento de tantísima importancia artística se encuentre en condiciones tan lamentables de abandono y ruina, por muy de un particular que sea la propiedad. Una ruina, por cierto, que el día menos pensado puede causar (la providencia no lo quiera) cualquier desgracia, pues no hay que olvidar que el conjunto se alza al pie de una calle de tránsito de personas y vehículos. No hay más que ver el estado de alguna ventana (ver fotografías) para comprender que en cualquier momento molduras de gran tamaño pueden desprenderse y caer sobre dicha calzada.


Una ventana a punto de caer.




EL CHIRINGUITO

En dicha entrada de 2009, nos sorprendíamos por el hecho de que adosado al acceso principal del palacio (portada de maravilloso estilo renacentista) existiera un chiringuito de fiestas que la ocultaba casi en su totalidad. Pues bien donde hubo uno, ahora hay dos, a los que se han sumado los característicos contenedores de basura. Todo ello forma un conjunto ciertamente pintoresco. En fin, contra esto no encuentro palabras, pero reconozco que siento una gran tristeza. He recibido críticas aquí por denunciar esto mismo, y ciertamente son críticas que no alcanzo a comprender. Creo que cualquier pueblo está obligado a hacer valer su patrimonio, aunque sólo sea por algo tan interesado como crear o mantener una fuente de riqueza. Cadiñanos tiene mucho e importantísimo patrimonio que enseñar al mundo, y si se le dignifica como merece, mucho mejor.   


La portada renacentista oculta.

miércoles, 23 de enero de 2013

OJO GUAREÑA, NEGRURA DEL RÍO CIEGO

"Ójo Guareña". El río se sumerge en las tinieblas. 

"Ojo Guareña". La negrura de la cueva. 

FOTOGRAFÍAS: Sumidero Ojo Guareña (Tomadas el 20 de enero de 2013). 

De pronto, el camino-lecho se interrumpe y aparece el agujero. Sin margen para pensarlo, se cuela el río por la huronera-guareña, pasando de la luz del día a la oscuridad de la noche subterránea, de su ser verde esmeralda al negro de la nada. A partir de aquí, lo mismo le dará mantener sus ojos abiertos que cerrados, la negrura será su única compañera hasta salir de nuevo a la superficie, tras un atropellado discurrir por un largo dédalo de soledades. El enfurecido hurón-río, tras su salto inicial, es recibido por una gran sala, una catedral de gigantescos bloques negros; un estremecedor y eternizado estruendo celebra entonces su triunfal entrada en el cataclismo. El río no ve, y en su loca ceguera, se cuela, se retuerce, no descansa, conoce caminos, atajos y recovecos, y aun conociéndolos, choca con todo lo que encuentra a su paso, abriendo nuevas vías de fuga. Su violencia le hace soltar espumarajos de furia y barro por donde pasa, los va depositando en las ruinas de la roca madre, fijándolos en los anárquicos bloques, guardianes penitentes de la gran sala. Hace poco, su turbulencia y caudal anegaron la totalidad del vacío, por ello, rabiosas salivas cuelgan todavía del techo como estalactitas que nunca fraguarán. Así continuará la noche del río por los siglos de los siglos. 

En recuerdo de una exploración por el sumidero de "OjoGuareña".
A mis compañeros de exploración

martes, 22 de enero de 2013

PANELES EXPLICATIVOS AQUÍ Y ALLÁ


El protagonismo del panel. 

Vegetación salvaje oculta el panel. 
Cuatro paneles para un eremitorio
 en Castrillo de la Reina. 

Fotografías del castillo que está detrás.




FOTOGRAFÍAS: Ojo Guareña, mirador de San Bernabé (Tomada el 21-1-2013). Panel en un humedal cercano al Páramo de Masa (Tomada en 18-10-2011). Castillo de Rojas (Tomada en 2012).

En los últimos tiempos han proliferado por toda la geografía burgalesa paneles con textos y fotografías que tratan de destacar el interés de las cosas patrimoniales que los turistas vamos a visitar, bien sea las ruinas de un castillo, una ermita, un humedal o .... Son estructuras de madera, hincadas en el suelo, algunas con tejadillo, que parecen salidas de la misma fábrica. No me pregunto dónde ni quién las fabrica, pero sí que me llama la atención que algunos apenas aportan nada, y sin embargo, pueden degradar el medio con su presencia. Ayer tuve ocasión de comprobar cómo en el parque de Ojo Guareña, sobre la ermita y farallón rocoso de San Bernabé, han colocado uno de estos paneles explicativos que distrae la soberbia visión de Sotoscueva, sus pueblos y sus montes nevados del Somo. Me llamó sobremanera la atención porque a pocos metros, en el lugar de aparcamiento de coches, hay otros carteles explicativos. Que digo yo que, por qué era necesario poner otro panel más donde el impacto negativo es tan evidente. Pienso que quizá haga falta un poco de coherencia y control en la colocación de estos elementos, no vaya a ser que haya de recurrirse a  aquello de “prohibido pegar carteles”. Por no hablar de los que se colocaron en lugares inverosímiles, por donde nadie pasa y que, con el paso del tiempo, han sido abandonados y devorados por la vegetación. En fin, quizá el tema de la proliferación panelaria podría ser un aspecto más, o consecuencia, de las alegrías con las que hemos manejado los dineros públicos en los últimos tiempos.


viernes, 18 de enero de 2013

SAN ANTÓN Y EL DESCANSO DE LOS ANIMALES


Tras la bendición de los animales en el barrio de Las Huelgas,
se reparte pan, chorizo y vino entre los asistentes. 
Antorchas de San Antón en  Arroyal.

San Antón pardo,
que me quemo,
que me ardo,
que viva San Antón,
con un lechón

FOTOGRAFÍAS: Celebración de San Antón en el barrio de Las Huelgas (Burgos) Tomada el 17-1-2013. Procesión con antorchas en Arroyal (2011).  

Cuando los pueblos estaban habitados, los vecinos tenían una y mil fiestas de guardar y los animales tan sólo una. Nunca el sindicato de los animales domésticos reivindicó otra ni luchó por corregir esta desproporción, como mucho, logró un aguinaldo especial de pienso o grano por Noche Buena. Su poco reivindicativo líder era San Antón, cuyos méritos para encabezar la gran coalición animal nos son desconocidos. Todos los años y el mismo día 17 de enero, ayer, festividad del santo, las bestias (bestia, animal, qué horribles y ofensivos nombres para llamar a los miembros de una coalición que tanto bien hacía-hace) celebraban su jornada de descanso anual, que no semanal. Una jornada que era-¿es? dirigida por la patronal vecinal. Pero bueno, menos daba una piedra, y así, veamos una pequeña muestra del costumbrismo burgalés en torno a esta jornada festiva de los animales


            “Ese día los animales guardaban fiesta, no les mandaban trabajar”.

Valdelacuesta  19-3-1999 


“A los animales, a los burros y a las caballerías, [el día de San Antón] no se las hacía trabajar, ni a los bueyes tampoco. Y  con el otro San Antonio, tampoco se las hacía trabajar en la hacienda”.

Carazo  27-7-1998


“El día de San Antón sacábamos los cerdos, las gallinas, y las ovejas, y los [otros] animales, y los dábamos unos paseos, unas vueltecitas, por el corral y todo. Porque era la fiesta de ellos”.

Pampliega  22-7-2003


“Yo me acuerdo que mi abuela, el día de Noche Buena, el día de San Antón, y no sé si eran tres días al año, les echaban [a los animales] trigo, porque dice que era la fiesta de ellos, tenían que honrarles con eso y se les echaba toda clase de pienso. A mi abuela se lo oí yo”.

Reinoso 5-9-2003


“Por San Antón aquí había la costumbre de cortar un poco pelo a las vacas y a todos los animales; un poco pelo pa que no las pasaría desgracias a las vacas. Al ganao de lana y eso yo no lo he visto [hacer].  Y a los niños también se les cortaba otro poco pelo, porque dice que San Antón nos protegía así.
Yo recuerdo a mi padre [que me decía]: “bueno hija, ya hemos terminao con el ganao, ahora vamos a cortaros el pelo a todos. Y nos [lo] cortaba. Yo, a mis niños, cuando eran pequeños, la costumbre [que tenía] era [de] cortarles un poco pelo. Y mi nuera todavía sigue [con esta costumbre]: el día San Antón, te va y te corta un poco pelo”. 

Villamiel de la Sierra: 26-7-2003




miércoles, 2 de enero de 2013

UN GRAFFITI EN LA ESTACION DE PEÑAHORADA


Estación del fc. Santander-Mediterráneo
en Peñahorada.

FOTOGRAFÍA: Estación de tren en Peñahorada (Tomada el 1 de enero de 2013).  

Despistados, padre e hijo llegaron a la estación de Peñahorada dispuestos a tomar el primer tren a Villarcayo. Se encontraron con una gigantesca ruina y ello les deprimió. Lo siento, hijo, desconozco este lugar, ya no hay vías, ya no hay estación. A veces los graffitis de dos trazos pueden expresar más y mejor que largas conferencias. ¿Quién mejor ha sintetizado lo que ha ocurrido con los ferrocarriles burgaleses desaparecidos? Gracias, artista desconocido, por tu sensibilidad, por tu obra de arte.