Mapa de la provincia de Burgos con señalización de los lugares donde se cultivaron viñedos y se produjo vino. |
Sector del medio oeste de Burgos con señalización de lugares donde se cultivaron viñedos y se produjo vino churrillo. Bodega con fachada de sillería en Villasandino |
Bodega y cubas de chacolí en Montejo de San Miguel (Museo Etnográfico) |
Viñedo otoñal en la ribera del Duero |
FOTOGRAFÍAS: Bodegas en Caleruega, Villasandino, Montejo de San Miguel, Santa Cecilia y La Sequera de Haza.
No
era mi intención al iniciar el tema de las bodegas llegar tan lejos como ya
hemos llegado. El viejo y tradicional mundo vitivinícola tiene tantas y tan
curiosas ramificaciones susceptibles de ser abordadas, que te atrapa poco a
poco y sin apenas darte cuenta. Cuando ya crees que has aportado todo lo que
pretendías, incluso más de lo que en principio esperabas, surgen unos y otros
aspectos que te animan a continuar. Viene a ser algo así como la parábola
de las cerezas, que pretendes coger de una banasta un simple ramillete de ellas
y otros vienen detrás enganchados formando una cadena. Y así, queridos amigos
de este Cajón de Sastre, héteme aquí siguiendo una nueva y deshilachada senda
de este pequeño universo, ahora componiendo un mapa del vino que ni en sueños
hubiera imaginado.
Nunca he sido un especial gustador de vinos, ni burgaleses ni de otros lugares, y mi genética no me ha llevado a ser un sibarita de las cosas, tampoco del vino. En realidad, en este tema solo alcanzo a entender que una botella de vino de cien euros debe ser mejor que otra de cuatro, y punto. Pero, siendo esto así, no quita para que conozca que en la provincia de Burgos hay y hubo amplias zonas geográficas donde se cultivan y cultivaron viñedos y se obtuvo y obtiene vino de ellos, lo sé por mi actividad de curioso y empedernido viajero por la provincia. En algunas de esas zonas, los viñedos ya no forman parte del paisaje (algunos llegué a conocer que ya no existen), quedando como testimonios los cientos o millares de bodegas en las que se produjo vino. Este es el caso de la zona del medio oeste, la del vino churrillo, que fundamentalmente abarca el territorio de los viejos partidos judiciales de Castrojeriz y Villadiego. Otras zonas, en cambio, han tenido más suerte y todavía en ellas los viñedos permanecen y producen vino, al igual que durante siglos lo hicieron, como es el caso de la vega del Arlanza y ribera del Duero, ambos con denominación de origen y formando conjuntos próximos entre sí, aunque visiblemente separados.
Mención
aparte merecen pequeños enclaves del noreste de la provincia en los que se cultivaron viñas para la obtención de vino, tanto el normal como el chacolí, como son La
Bureba, el entorno de Oña, Trespaderne y Miranda de Ebro, y en menor grado el
valle de Mena. El vino chacolí, expresado así en el Diccionario de Pascual
Madoz (1845-50), cuando se relacionan las producciones en cada población o lugar,
nos sirve para constatar que tuvo cierta importancia en Burgos, quizá no tanta
como para haber podido entrar en las famosas controversias por la denominación
de origen (País vasco, Cantabria), pero sí, al menos, con el valor suficiente
para recordarnos el hecho histórico de su existencia (32 lugares productores lo
avalan).
El
mapa que he podido elaborar, con la inestimable ayuda del citado Diccionario,
muestra amplios sectores de la provincia atiborrados de vino, pero también
grandes superficies en las que, bien sea por cualidades del terreno no aptas, por
factores climáticos o de otra índole que se me escapan, ni se produce ni se
produjo. Ver este mapa es un espectáculo, no solo por los 253 puntos
productores de vino marcados (1), sino por esos
espacios “vacíos de vino”, que nos llevan a hacernos preguntas. Aunque para responderlas,
si es que no estuvieran ya respondidas, harían falta especialistas en la
materia, posiblemente edafólogos, meteorólogos y alguno más.
Espero,
queridos amigos, que disfrutéis con la vista de este mapa de la provincia
burgalesa, hasta ahora inédito y que tanto sugiere, como yo mismo disfruté al
confeccionarlo. Tomemos un chato de vino de alguna bodega subterránea para
celebrarlo.
NOTA:
En el Diccionario de Pascual Madoz, quizá por descuido o por no haber querido
incluir todas las producciones dadas en ellos, no se mencionan como productores
de vino los lugares de Villavieja de Muñó, Villasandino, Villalba de Duero, Tamayo,
Santibáñez de Esgueva, Santa María Mercadillo y Mecerreyes. Así que, corrigiendo esta lagunas y para que sea más completo el mapa, se han incluido estos lugares sabiendo que en ellos existen bodegas que
atestiguan dicha producción.
Asun Velles
ResponderEliminarLa bodega de Santa Cecilia es como la casita de chocolate del cuento. Gracias